La Medicina Funcional Integrativa se basa en la complementación de la medicina convencional o alopática, junto con terapias de medicina complementaria y alternativa, como la Ortomolecular, para las cuales existen datos científicos de alta calidad sobre su seguridad y eficacia.
Tiene como objetivo recuperar la salud del paciente a través de la búsqueda del origen de la enfermedad. Más allá que tratar tan sólo síntomas, nos centramos en la curación desde una perspectiva menos invasiva y más eficaz.
El modelo de Medicina Funcional Integrativa es individualizado, centrado en el paciente, donde se empodera al paciente para que sea responsable de su salud. Requiere un conocimiento detallado de la genética, bioquímica y estilos de vida del paciente, que permitirá planear tratamientos para mejora de su calidad de vida.
A partir de una primera visita detallada donde abordamos todos los aspectos de la vida del paciente, tanto físico, psíquico y emocional, somos capaces de entender los problemas de salud y de esta forma tratar de forma holística al paciente. Utilizamos la tecnología más avanzada, como la terapia intravenosa, procedimiento en el cual se administra, entre otros, nutrientes, vitaminas y minerales, antioxidantes… y con la asistencia de un equipo interdisciplinar especializado.
“Solo podemos curar aquello que podemos comprender”